martes, 10 de septiembre de 2013


Independencia


Las autoridades virreinales se mostraron flexibles frente a la inquietud libre pensadora de los arequipeños una muestra de ello es la fundación de la Academia Lauretana Ciencias y Artes el 10 de diciembre de 1821, bajo dirección de Evaristo Gómez Sánchez, que tuvo a su vez la primera imprenta del departamento. Apenas construida la Academia, sus principales integrantes Francisco Xavier de Luna Pizarro, Aparicio Gómez Sánchez, Francisco de Paula González Vigil, Gaulberto Valdivia, Manuel Amat y León y Juan de Dios Salazar, tomaron partido a favor de la emancipación.
Según el historiador José Agustín de la Puente Candamo en Arequipa se vivió la independencia igual que todas las provincias de Perú, en guerra civil. Por su geografía y ubicación, tuvo circunstancias especiales; por ejemplo cuando la revolución de Pumacahua y las tropas rebeldes entraron a Arequipa por poco tiempo hubo un momento de euforia pero luego salieron de la ciudad, y se mantuvo el poder virreinal en Arequipa hasta la batalla de Ayacucho; no es que Arequipa estuviera en contra de la independencia, sino que libraba una guerra civil.
Las autoridades virreinales se mostraron flexibles frente a la inquietud libre pensadora de los arequipeños una muestra de ello es la fundación de la Academia Lauretana Ciencias y Artes el 10 de diciembre de 1821, bajo dirección de Evaristo Gómez Sánchez, que tuvo a su vez la primera imprenta del departamento. Apenas construida la Academia, sus principales integrantes Francisco Xavier de Luna Pizarro, Aparicio Gómez Sánchez, Francisco de Paula González Vigil, Gaulberto Valdivia, Manuel Amat y León y Juan de Dios Salazar, tomaron partido a favor de la emancipación.
Las autoridades virreinales se mostraron flexibles frente a la inquietud libre pensadora de los arequipeños una muestra de ello es la fundación de la Academia Lauretana Ciencias y Artes el 10 de diciembre de 1821, bajo dirección de Evaristo Gómez Sánchez, que tuvo a su vez la primera imprenta del departamento. Apenas construida la Academia, sus principales integrantes Francisco Xavier de Luna Pizarro, Aparicio Gómez Sánchez, Francisco de Paula González Vigil, Gaulberto Valdivia, Manuel Amat y León y Juan de Dios Salazar, tomaron partido a favor de la emancipación.


Según el historiador José Agustín de la Puente Candamo en Arequipa se vivió la independencia igual que todas las provincias de Perú, en guerra civil. Por su geografía y ubicación, tuvo circunstancias especiales; por ejemplo cuando la revolución de Pumacahua y las tropas rebeldes entraron a Arequipa por poco tiempo hubo un momento de euforia pero luego salieron de la ciudad, y se mantuvo el poder virreinal en Arequipa hasta la batalla de Ayacucho; no es que Arequipa estuviera en contra de la independencia, sino que libraba una guerra civil.



Arequipa en el Virreinato



Hallándose en esta ciudad el Virrey D. Francisco de Toledo, con motivo de la visita general que hizo al territorio de su jurisdicción, a pedido del Cabildo y siendo procurador general D. Diego Hernández Hidalgo previa una información de nueve testigos de los más antiguos vecinos y fundadores de la ciudad, mandada actuar por el decreto de 20 de agosto de 1571 ante el Escribano Juan Ruiz de Gamarra, le concedió, con fecha de 7 de noviembre de 1575, el título de "muy noble y muy leal", en virtud de sus méritos y servicios a la causa real. Según Travada ese título fue confirmado por Felipe II "con muchas más honras" en dos cédulas, una fechada en Badajoz el 20 de septiembre de 1580 y la otra en Madrid el 28 de enero de 1594, lo cual no parece muy exacto, toda vez que en esa como en otras cédulas se hacía únicamente referencia a ese título, que ya tenía Arequipa. La de Badajoz contiene elogios para las matronas de esta ciudad por el valioso donativo que hicieron de sus joyas a fin de aliviar la situación del Tesoro Real, exhaustos por los fuertes gastos que ocasionaban las guerras contra los musulmanes y protestantes, y la de Madrid es también de agradecimiento por haber aceptado la nueva contribución de la Alcabala, que produjo una buena renta. Durante el virreinato la ciudad destacó por ser el eje comercial del centro y sur de este, a través del puerto de Quilca e Islay. Esto influyó en el desarrollo de una pequeña burguesía en desmedro de los grandes terratenientes. Arequipa se mantuvo fiel a la causa real durante las guerras civiles de los conquistadores por lo que recibió el título de "Muy noble, leal y fidelísima". Sin embargo no estuvo ajena a los pensamientos e ideales libertarios que se manifestaron a través de la Academia Lauretana. Entre los próceres de la Independencia destaca el poeta Mariano Melgar quien fuera fusilado por los realistas después de la batalla de Humachiri.

domingo, 8 de septiembre de 2013

FUNDACIÓN DE AREQUIPA

FUNDACIÓN INCAICA DE AREQUIPA


A la caída del Imperio del Tiahuanaco devino un período de decadencia. La costa y la sierra quedaron fraccionadas en diversos señoríos y tribus. Una de éstas, la de los Ayar tenía su asiento al Sureste del Cuzco y estaba dividida en cuatro Ayllus, formados por restos provenientes de aquel Imperio.
El jefe del más poderoso de esos ayllus, llamado Manco, inició la reconquista del antiguo dominio e invadió el valle del Cuzco, dónde fundó el señorío de los Incas (principios del siglo XII), que más tarde había de ser el grandioso Imperio del Tahuantinsuyo, regido por una admirable administración. Manco, que tenía por totem al Sol, impuso el culto helíaco, asegurando ser hijo y enviado del Astro Rey. Se casó con su hermana Mama Ocllo y estableció la sucesión hereditaria en el gobierno.
Después de un largo reinado, en el que dominó a las tribus dentro del recinto del Cuzco, se llamó "Ccapac " o "Supremo y rico soberano ". Le sucedieron su hijo Sinchi-Roca, tan valeroso como prudente, y su nieto Lloque Yupanqui, el zurdo memorable, quienes consolidaron la dominación del valle del Cuzco.
El cuarto Inca, Mayta Ccapac, del que se refieren hechos tan extraordinarios como los del héroe Hércules de la leyenda griega, conquistó las regiones de Puno, Moquegua, y Arequipa. Al llegar al valle del Chili, algunos de sus súbditos, encantados por la belleza del paisaje y la suavidad del clima, le pidieron, por intermedio de su jefe o capitán, la merced de poblar la comarca, y el inca respondió "ari, qquepay ", frase quechua que en castellano significa "sí quédate ", refiriéndose a ese jefe. Esta etimología es la que da el Padre Calancha, con la traducción que atinadamente estableció J. Ignacio Gamio.
Entre las otras etimologías que se atribuyen al nombre de la ciudad cabe mencionar las siguientes. Según el Padre Fr. Blas Valera, citado por Garcilaso de la Vega, "arikkepa " quiere decir "trompeta sonora ". Middendorf cree que "ari qquepa " significa " lugar situado a espaldas de la serranía".Römulo Cuneo-Vidal en su "Enciclopedia Incana" considera que proviene de Aru-quippas,es decir hablantes incipentes del Aru,porque en el Perú hay varios Arequipa en distantes lugares geográficos y es inverosimil que el Inca haya dicho lo mismo para cada caso,además que el patrón de poblamiento inca era a través de mitimaes; a pesar de esto aún se sigue dando crédito a la información de Calancha.

Los capitanes de este Inca trajeron de las provincias conquistadas tres mil familias y con ellas fundaron primero los pueblos de la Chimba o Yanaguara, Caima y Tiabaya y después los de Chiguata, Paucarpata, Socabaya y Characato además construyeron las acequias de la Antiquilla, Acequia Alta y San Jerónimo, que tuvo entonces el nombre de Coa. La Acequia Alta fue ensanchada por los españoles, que hicieron todas las acequias regadoras de la márgen izquierda del río Chili, excepto la Coa.







miércoles, 4 de septiembre de 2013

                               
 FUNDACIÓN DE AREQUIPA

Fundación Española de Arequipa


Arequipa antes de la llegada de los españoles, estaba conformada por asentamientos humanos de poca jerarquía dentro del sistema urbano del Tahuantinsuyo.  Fue una ciudad de paso entre la costa y la sierra (camino al Cusco) sin un importante rol económico o administrativo dentro del imperio.
A la llegada de los españoles, la ciudad de Arequipa, fue fundada por don Manuel Garci de Carbajal el 15 de agosto de 1540 por orden del marqués don Francisco Pizarro fundó laVilla Hermosa de la Asunción del Valle de Arequipa, después de haber trasladado previa consulta y juramento, a los españoles que se habían instalado en Camaná.  Fue establecida "encima de la barranca del río" según reza el acta fundacional.  A partir de este momento, se proyecta como una urbe foco de desarrollo en el sur del Perú.

El territorio regional se organiza sobre la base de la institucionalidad feudal.  Se centraliza todo el poder en una sola institución: la iglesia.  El rol que juega Arequipa en tal periodo, fue de Centro de Organización de la región sur, ante la necesidad de una salida al mar para el aprovisionamiento de las provincias del interior andino y la exportación de riqueza a la metrópoli (España).

Con el paso de los años, se presenta un auge en la actividad comercial lanera, vitivinícola y minera, sin embargo, los efectos de la gran depresión se dejan sentir en Arequipa, cayendo la demanda de los productos de exportación y de importación, bajando los precios del algodón, el azúcar y la lana.


El impulso industrial vinculado a la apertura de nuevas vías interregionales, al Ferrocarril y orientado al mercado interno del sur, da paso a una mayor diversificación económica, convirtiendo a Arequipa en el Eje Industrial del Sur.El territorio regional se organiza sobre la base de la institucionalidad feudal.  Se centraliza todo el poder en una sola institución: la iglesia.  El rol que juega Arequipa en tal periodo, fue de Centro de Organización de la región sur, ante la necesidad de una salida al mar para el aprovisionamiento de las provincias del interior andino y la exportación de riqueza a la metrópoli (España).Con el paso de los años, se presenta un auge en la actividad comercial lanera, vitivinícola y minera, sin embargo, los efectos de la gran depresión se dejan sentir en Arequipa, cayendo la demanda de los productos de exportación y de importación, bajando los precios del algodón, el azúcar y la lana.
El impulso industrial vinculado a la apertura de nuevas vías interregionales, al Ferrocarril y orientado al mercado interno del sur, da paso a una mayor diversificación económica, convirtiendo a Arequipa en el Eje Industrial del Sur.Con el paso de los años, se presenta un auge en la actividad comercial lanera, vitivinícola y minera, sin embargo, los efectos de la gran depresión se dejan sentir en Arequipa, cayendo la demanda de los productos de exportación y de importación, bajando los precios del algodón, el azúcar y la lana.El impulso industrial vinculado a la apertura de nuevas vías interregionales, al Ferrocarril y orientado al mercado interno del sur, da paso a una mayor diversificación económica, convirtiendo a Arequipa en el Eje Industrial del Sur.El impulso industrial vinculado a la apertura de nuevas vías interregionales, al Ferrocarril y orientado al mercado interno del sur, da paso a una mayor diversificación económica, convirtiendo a Arequipa en el Eje Industrial del Sur.


El 2 de noviembre de 1575, por sus grandes servicios prestados a la Corona, en nombre de su Católica Majestad don Felipe II, el Virrey don Francisco de Toledo, concedió a la ciudad de Arequipa el título de “MUY NOBLE Y MUY LEAL”, comprobándose que sus fundadores fueron gente principal y distinguida; que estuvieron al lado de los Pizarro cuando la ciudad de Los Reyes fue sitiada por el ejército de Manco Inca; que estuvieron bajo la bandera del Licenciado Vaca de Castro, haciendo campaña contra Almagro y contribuyendo a su derrota en la batalla de Chupas; que dieron asilo a Diego Centeno cuando estuvo perseguido por don Francisco de Carbajal; que engrosaron las filas de Blasco Núñez de Vela, concurriendo a la batalla de Añaquito, lo que les valió confiscación de sus bienes, prisiones y crueldades. Que conocida la llegada de don Pedro de la Gasca, lo apoyaron decididamente, colaborando en la organización de las fuerzas de don Diego Centeno y enviando a don Manuel Garci de Carbajal cerca del Licenciado, con fuerte suma de dinero recaudado generosamente entre todos los vecinos.